El pensamiento estratégico es un tema inherente a la dirección de negocios que se relación todas las áreas y operaciones dentro de una organización, sin embargo el actuar de la estrategia no es tema tan superficial como el tratamiento que se le ha dado en los últimos años. No podemos negar que el tema de estrategia se ha puesto de moda y no está por demás; un mundo cambiante a una velocidad increíble con un impacto cada vez mayor por parte de la tecnología y la globalización, los retos que enfrenta el sector público y los gobernantes, la productividad y escasez de los recursos, la responsabilidad social en el ámbito empresarial y un sinfín de variables que confluyen alrededor del empresario hacen de la estrategia un tema de suma relevancia. ¿Pero que es la estrategia? Si bien escuchamos todo el tiempo sobre acciones y programas estratégicos que incluyen dicha palabra ya de forma natural, tratan de todo excepto de un asunto estratégico, es decir, el exceso de uso de la palabra estrategia ha demeritado por completo su importancia y su real significado. El vocablo estrategia tiene sus orígenes en asuntos de milicia. Los ejércitos son las primeras formas de organización que comienzan aplicando la estrategia que ha evolucionado incorporándose paulatinamente en la dirección de las empresas. Ahora bien, el significado no nos interesa en un sentido pragmático pero sus implicaciones si son un punto de análisis interesante.

La mayoría de actividades que llevamos de forma cotidiana en las empresas no resultan ser un tema estratégico. Al igual que la mayor parte de programas gubernamentales, la palabra estrategia sale sobrando en los títulos. En realidad y con un enfoque mas simplista, un tema estratégico es identificable por transformar a la empresa. No importa el ámbito o la medida, la estrategia tiene por objeto modificar el status quo de la organización. En otras palabras, realizar estrategias conlleva a la empresa a crear, moldear, modificar o mejorar ventajas competitivas. En este sentido, la estrategia está íntimamente relacionada con la competitividad de la organización. Por ejemplo, el departamento de compras de una empresa, puede gestionar descuentos y condiciones de pago, sin embargo eso no lo hace ser una actividad estratégica, aun que quizá le llamen “compras estratégicas” . Por otro lado, si los encargados del departamento van a desarrollar nuevos proveedores, eliminando intermediarios, están incrementando el control que tienen sobre la cadena de suministro, rompiendo el antiguo esquema y modificando a la vez el status quo de la empresa, siendo en este caso un tema de estrategia.

Bajo estas características, si evaluamos la calidad de vida en la sociedad, podemos aventurar que alrededor de un 99% de los programas gubernamentales no entiende el concepto de estrategia. Pero volviendo al tema de los negocios, es importante entender entonces el concepto pues esto nos permitirá mejorar la posición competitiva nuestra empresa. Así pues, herramientas como la planeación estratégica se debe diseñar a conciencia, con el objetivo de maximizar la competitividad del negocio, ya sea en los procesos internos de la empresa, en el desempeño comercial, en la gestión financiera o cualquier otra área, no se debe perder el objeto real de la estrategia.

En un estudio realizado por investigadores de la Universidad Autonoma del Estado de Hidalgo, llama la atención que de pymes entrevistadas, el 21% carece totalmente de una estrategia definida mientras que, de acuerdo a cifras de El Economista, aproximadamente el 90% de las empresas en México no tiene un plan de negocios impactando directamente en la competitividad de las mismas. Dichas estadísticas siguen sin un cambio significativo a pesar de la evidencia a favor que cientos de estudios arrojan sobre las ventajas que genera establecer una estrategia empresarial. Desde una postura personal, el principal reto que enfrentan las empresas en el tema propuesta es una falta de pensamiento estratégico por parte de los directivos. La estructura mental es el arma principal del estratega y el pensamiento estratégico es algo que puede desarrollarse con la práctica y la experiencia. A continuación se muestran 7 aspectos que deben ser imprescindibles en el pensamiento estratégico:

Visión
La visión no es un enunciado bonito que se cuelga en la pared. Es algo que motiva, que guía la toma de decisiones, que coadyuva a construir el sueño que deseamos. El pensamiento estratégico se nutre de la visión. “No corras en dirección al dinero, construye una visión, ve detrás de ella y el dinero correrá detrás de ti.”

Creatividad
El pensamiento estratégico funciona si creamos alternativas a la acción. La estrategia requiere de romper el status quo de la empresa por lo que la creatividad es imprescindible. El mejor enfoque de acuerdo a algunos expertos se encuentra en la forma de cuestionar las cosas. Comienza a hacer las preguntas correctas y verás como fluye la creatividad.

World-Class People
El trabajo en equipo es fundamental. Rodearte de personas inteligentes, capaces y creativas apoyarán al diseño y ejecución de la estrategia. A pesar de la tecnología y el desarrollo industrial, las personas aun siguen siendo la chispa que mueve a los negocios.

El plazo
El pensamiento estratégico involucra el corto y el largo plazo. No trates de generar buenos resultados en el corto plazo comprometiendo la salud de tu compañía en el largo plazo. La estrategia genuina sabe esperar y construye la visión a través del corto, el mediano y el largo plazo.

Value Drivers
Olvídate de las razones financieras. El pensamiento estratégico va mucho mas allá de los números. Identificar y evaluar los verdaderos generadores de valor es todo un arte en la estrategia. Busca y entiende cuales son los factores que construyen valor económico en la empresa.

Cadena de valor
Enumera las actividades que realizas en la empresa de forma diaria e identifica las que construyen verdadero valor a la empresa. Alrededor del 90% de nuestro tiempo está ocupado en actividades que son necesarias mas no agregan valor al negocio. El pensamiento estratégico trata de invertir esos números.

Pasión por Servicio
La estrategia debe servir a los demás. En palabras de Richard Branson, “un negocio no es mas que una idea para hacer la vida de otras personas mejor”, aquí se encuentra la pasión y la visión en el largo plazo. Un pensamiento estratégico autentico no segrega la responsabilidad social y nunca se desentiende del entorno.